Si las recetas del
Profesor Dornbusch tienen éxito en Venezuela, es probable que termine
asesorando al gobierno colombiano en la forma de bajar la inflación a un sólo
dígito.
Los datos divulgados
por el DANE a comienzos del mes muestran que la inflación continua alta y muy
por encima de la meta fijada por la Autoridad Monetaria. En efecto, el DANE nos
muestra una inflación en los primeros cinco meses cercana al catorce por
ciento, cinco puntos porcentuales por debajo del 19 por ciento fijado por la
Junta Directiva del Banco de la República. Como la inflación de los últimos
doce meses está casi cinco puntos porcentuales por encima de la meta
inflacionaria del 19 por ciento, para poder llegar a la meta de inflación sería
necesario tener inflaciones mensuales que fueran inferiores en casi un punto
porcentual, a las registradas el año anterior.
Si miramos algunos
determinantes de la inflación podríamos ver que estos se encuentran por fuera
de los límites fijados por la Junta Directiva del Banco de la República. Los
medios de pago en la última semana volvieron a salirse de los corredores
fijados por el Banco Central. El crecimiento acelerado de los medios de pago y
de los cuasidineros, sin lugar a dudas, inducirán fuertes presiones
inflacionarias que dificultarían el logro de la meta inflacionaria.
Como si no fuera
suficiente la presión de los medios de pago, en estas tres semanas operará con
gran intensidad el llamado ciclo económico de origen político. El candidato del
partido liberal con su Ministro de Agricultura han comenzado a ofrecer
regalitos para tratar de atraer electores que en la primera vuelta se mostraron
poco convencidos por los ofrecimientos del partido de gobierno.
Ante los
acontecimientos en Venezuela, el control de la inflación colombiana se ha
vuelto extremadamente crítica. Para poder mantener la situación en la frontera
bajo control es necesario que nuestra inflación esté muy por debajo de la
inflación en Venezuela.
Mientras la inflación
venezolana compense la devaluación del Bolívar frente al dólar, las exportaciones
colombianas pueden mantenerse. Tan pronto la economía venezolana entre en un
proceso de estabilización y la inflación en el hermano país comience a bajar,
el problema en la frontera oriental se complicará tremendamente.
Como ha informado la
prensa, los asesores del FMI, entre ellos el Profesor Dornbusch del MIT, se han
trasladado a Caracas para comenzar a promover sus recetas de estabilización
inmediata. Es muy posible que ante la gravedad de la crisis y teniendo en
cuenta la necesidad de contar con el apoyo del FMI, al gobierno venezolano no
le quede otra alternativa que la de emprender un fuerte programa de ajuste que
se traduzca en una pérdida de competitividad de la economía colombiana con
serias consecuencias para la zona fronteriza.
La posibilidad de que
un plan de estabilización pueda dar resultado en Venezuela depende en buena
parte en que el Gobierno venezolano tome medidas drásticas como las propuestas
por el Profesor Dornbusch. La congelación de precios, salarios y la tasa de
cambio, es bastante atractiva y probablemente se tome muy pronto. Por el
contrario, la elevación del precio del petróleo y la gasolina y de otros precios
controlados por el gobierno, puede ser bastante complicada. Pero si se quiere
contar con el aval del FMI, necesario para contar con la confianza de la
comunidad internacional, será preciso hacer ajustes penosos en los precios de
algunos energéticos.
Deja una respuesta